'Legión': estos superhéroes son diferentes
La serie de Marvel que demostró que se podían hacer otras cosas en el género
En 2017, Marvel llevaba casi diez años de dominio de las taquillas mundiales, pero su fórmula empezaba también a mostrar algún que otro síntoma de agotamiento. Intentó que no se notara con Thor: Ragnarok y Guardianes de la galaxia, volumen 2, mientras sus series de Netflix estaban llegando a su final ante la posibilidad del nacimiento de Disney+ (que se produciría dos años más tarde). A finales de aquel año, Disney anunciaría la compra de Fox, pero en esos meses anteriores al anuncio, esa compañía estrenaría dos de las historias de superhéroes más diferentes de lo que Marvel estaba haciendo. Por un lado, teníamos la película Logan, una especie de western crepuscular con un Lobezno viejo y cansado; por el otro, FX estrenaba una imaginativa mirada al género a través de Legión.
Fox seguía teniendo los derechos de los mutantes y los X-Men, pero las últimas películas de estos habían sido un poco decepcionantes. Para que FX, su canal de cable básico, se animara a meterse en ese berenjenal, decidieron tomar a un personaje menos conocido de ese canon, pero con muchas posibilidades: David Haller, el hijo telépata de Charles Xavier, considerado el mutante más poderoso y, al mismo tiempo, el más peligroso. La responsabilidad de la serie recayó en Noah Hawley, que le había entregado a FX un casi inesperado éxito con la traslación a serie del universo de los hermanos Coen en Fargo, por lo que las expectativas eran altas.
El primer episodio de Legión las superó todas. La apuesta visual de la ficción dejaba en mantillas todo lo que el género superheroico había hecho antes, y se notaba que Hawley no quería hacer una serie de mutantes al uso. Quería aprovechar el potencial de Haller y de sus poderes para adentrarse por otros caminos y, sobre todo, contar la historia de una manera distinta, una que intentaba transmitir al espectador la cacofonía de voces y la marejada de recuerdos y pensamientos que sacudían la mente de su protagonista.
Lo que se veía en pantalla era a ratos lisérgico, nostálgico, peculiar, juguetón, siniestro o convencional, dependiendo de a lo que David se estuviera enfrentando. Legión es la historia de cómo va descubriendo quién es en realidad, ya que nunca conoció a su padre, y su aprendizaje para distinguir lo que solo está en su cabeza de la realidad. También debe controlar un poder inmenso que está muy ligado a su propia enfermedad mental, y encontrar el camino entre todo eso es complicado, más aún cuando aparece un misterioso, y poderoso, villano que quiere utilizar a David para sus propios objetivos.
Sus esfuerzos por desenterrar recuerdos cruciales de su infancia se presentaban, por ejemplo, como si estuviera en una casa encantada, y cuando el villano aparecía por primera vez, perseguía a varios personajes al ritmo del Bolero de Ravel. Incluso veíamos una competición de baile para representar la pelea telepática entre David y el Rey Sombra. A su alrededor, por otro lado, se nos presentaba a otros personajes con poderes que, aunque podrían formar parte de la Patrulla X, tenían sus propias circunstancias, como el dúo entre una joven nativoamericana y un científico blanco. También se incluía un lugar con reminiscencias a la academia del Profesor X donde se refugiaban estas personas de la persecución de una agencia gubernamental.
Legión tiene varias subtramas y capas, todas girando alrededor del viaje de David hacia el control total de sus poderes. Qué pasará entonces es el otro gran dilema de la serie. En los cómics es un villano casi imposible de detener, y esa tentación siempre está presente para el de la serie, que se beneficia de la interpretación de un Dan Stevens que hacía tiempo que había dejado atrás Downton Abbey y que ya había dado vida a un tipo inquietante, como mínimo, en The guest.
Stevens encaja perfectamente en la sensibilidad de la serie, lo mismo que una Aubrey Plaza que salía de los papeles cómicos que la habían hecho conocida y abrazaba por completo la psicopatía y el lado juguetón de una de las facetas del Rey Sombra. El resto del reparto era, también, una colección de actores de lo más granado, desde Bill Irwin al descubrimiento de Rachel Keller (que luego saltaría a Fargo), Jemaine Clement o Jean Smart, que curiosamente participaría después en otra relectura de los superhéroes como Watchmen que, en lugar de explorar los traumas familiares y las enfermedades mentales de estos personajes, tiraba por su lado político y, en su caso, por una exploración del trauma generacional en sus personajes afroamericanos.
Tantos años de éxito en los cines de Marvel, con su fórmula para toda la familia y sus películas interconectadas, habían abierto también el camino para que aparecieran propuestas diferentes como esta Legión que, además, bebía bastante de las ilustraciones de Bill Sienkiewicz, que había plasmado en viñetas toda la confusión y el poder mental desatado de David. También se intentaría ofrecer algo distinto en el universo de los X-Men con la apuesta por el terror de Los nuevos mutantes, que debería haberse estrenado un año después de Legión pero se vio afectada, primero, por la compra de Fox por parte de Disney y, después, por la COVID-19.
Esa adquisición ha hecho que todas las adaptaciones de Marvel acaben en Disney+ y se ajusten a lo establecido, estilísticamente, por las películas del MCU. Se ha perdido, de momento, el ánimo de probar algo nuevo que estaba detrás de Legión, y que probablemente se va a quedar en el cajón con la reestructuración del estudio que se ha acometido ante los últimos fracasos en taquilla. Quizás David Haller sí sea único en su especie.
P.D.: Esta newsletter se va a tomar un descanso en agosto, pero en septiembre volveremos a la carga. Hasta entonces, sed buenos, que el ojo de Sauron todo lo ve.
Los datos de la serie
Dónde verla: Disney+.
Temporadas y capítulos: Tres, de entre ocho y once episodios cada una.
Creador: Noah Hawley, basada en el personaje de Chris Claremont y Bill Sienkiewicz.
Reparto: Dan Stevens, Aubrey Plaza, Rachel Keller, Amber Midthunder, Hamish Linklater, Bill Irwin, Jean Smart.
Si quieres más
Leer: Legión, de Tan Eng Huat y Simon Spurrier, muestra al personaje dirimiendo si debe seguir el legado de su padre.
Ver: Watchmen adapta de nuevo el cómic de Alan Moore encontrando otra manera de contar los mismos temas.
Escuchar: Children of the revolution, de T. Rex, es la canción que cierra la primera temporada.